La boda de Vanessa y Miquel fue una boda intima, con poquitos invitados, donde se respiraba el buen rollo y el cariño que se tenía toda la gente desde el primer momento. El sitio que eligieron no lo conocíamos, y a Nagore y a mi nos encantó, es un sitio precioso en el pueblo de Liendo, en Cantabria.
¿Quién dice que una boda no se puede planificar y hacer en tres meses? Vanessa y Miquel lo hicieron, y eso que no viven en Cantabría, sino en Barcelona, y como podéis ver en las fotografías todo salió a las mil maravillas.
¡Muchísimas gracias por confiar en nosotros pareja! Para Nagore y para mi fue un gustazo el poderos acompañar en un día tan importante para vosotros.
Preciosas fotos, todo muy documental, enhorabuena
Enhorabuena por el post, es un reportaje de boda lleno de colorido y expresividad. El lugar es ideal y las fotografías han sabido captar cada detalle de un día tan especial como ese, ¡Buen trabajo!